Mejoras materiales

Abstract

Mejoras materiales. // Damos con el mayor placer a nuestros conciudadanos la noticia de que las vías de comunicación de Sierra- Juárez a Tuxtepec, y de Miahuatlán a Huatulco,serán dentro de poco continuadas, mejoradas y concluidas respectivamente. // Se organizan al efecto dos compañías de personas amantes del progreso, que casi simultáneamente han enviado sus comisionados al gobierno del Estado para tratar de estas mejoras; la de Tuxtepec, representada por el C[iudadano]. Lic[enciado], Pablo Pantoja, y la de Miahuatlán, por el D[octo]r. Fernando Calvo. // Estamos informados de que el participio que estas compañías de comerciantes y propietarios quieren tener en la reparación y mejora de esos caminos, no es más que auxiliar con brazos y recursos las labores que emprendan, pidiendo solo al gobierno los instrumentos de trabajo necesario, y dejándole, por supuesto, la dirección inmediata y superior de la obra. Creemos, pues, que las propuestas hechas bajo tales auspicios, aún independientemente de lo que, una vez realizado el proyecto, debiera aprovechar al comercio y a la agricultura, son dignas de ser tomadas en consideración. // Pero pasando ahora a ocuparnos del beneficio público que la realización de tal proyecto proporcionaría a Oaxaca, diremos: que nunca más que ahora, que el Estado forma, por decirlo así, el centro de unión y la gran confluencia de relaciones de los Estados de Oriente, se necesita tener expeditas, amplias y seguras esas vías de comunicación. // Por Tuxtepec, como es sabido, nos comunicamos con la Costa de Sotavento, de donde se hacen a la mar los peligros o comisionados del gobierno, ya para el presidente de la República, o ya para los Estados Unidos, que es el inmenso almacén de provisiones para todo el continente. // Por Sotavento nos vienen también noticias oportunas de Ultramar, y no solo de tan lejos sino de la misma capital del ex imperio, supliendo así con la mayor seguridad la falta de comunicación regular, y de apreciaciones verídicas sobre los negocios políticos, por los caminos de la cañada y la Mixteca. Además; ¿quién no comprende el camino de Tuxtepec, no se hará desde luego un gran tráfico con el Estado de Veracruz, cuya base serian Miahuatlán y Tlacotalpam, remitiendo mercancías de conocido consumo a nuestra plaza, mientras que los especuladores de aquí, y aun nuestros artesanos activarian sus relaciones y su comercio con los mercados de la Costa ? // Por lo relativo a la importancia del camino de Huatulco, nos basta recordad que, antes de ahora, y siempre que la guerra ha dejado respirar a los hombres laboriosos, han dirigido sus vista hacia este punto de nuestro horizonte comercial. // Por Huatulco, o Puerto Ángel, nos comunicamos fácilmente con Acapulco, con toda la Costa del Pacífico, Panamá, California, &c. &c., por lo mismo, necesitamos un camino, y grande y bueno. // Habilitado el puerto,y abierto y seguro el camino, los buques de los Estados Unidos en competencia con muchos europeos, podrían surtir ventajosamente nuestra plaza, y no solo surtirían ellos sino que harían también el comercio de cabotaje, de que tanto espera esa inculta costa, ese bosque primitivo de ricas maderas, no hollado más que por aquel apóstol que dicen las historias haber venido a implantar la cruz, en el puerto, y que hoy existe en nuestra catedral. // Por otra parte: esos valles de Miahuatlán y de Ejutla, esa linea en fin, del puerto a la ciudad, adquiriría el más grande desarrollo; sus hermosas haciendas exportarían sus semillas o las consumirían con los transeúntes; los hombres se harían civilizados, y los pueblos serian ricos... // Nos detenemos, porque no queremos marchar al idealismo dejando correrla pluma al discurrir sobre las maravillas que improvisa el trabajo, el poder, la inteligencia donde quiera que obran y quieren hacer el ben. Deseamos, pues que los proyectos actuales, que se dirigen a este fin, teniendo cada cual su porvenir, lleguen a ser una realidad, tan acabada y tan provechosa, como son los veneros de que nos nutrimos, como es el aire imparable que respiramos. // Oaxaca.- Impreso por Manuel Rincón.- 1866